Vivir en las calles para muchos caninos y este perrito es una pesadilla, y muchos pasan década completa sin hogar, hasta que personas de buen corazón les brindan un hogar y una oportunidad que la vida les da.
El Perrito llamado Solovino, paso de vivir 11 años en las calles de los Ángeles, Estados Unidos. Más de una década vagando por la ciudad, sin hogar estable y rumbo alguno. ¡Pero existen personas de muy buena empatía!
Historia
Solovino, en un día común como cualquiera se postró enfrente de una casa para descansar de un día agitado y con mucha hambre, la persona de dicho hogar se percató e inmediatamente acudió al Santuario para animales de Roket Dog, porqué noto el estado de salud deplorable en el que se encontraba Solovino. Sabía que no podía dejarle así nomás, a su suerte, por que se dispuso a brindarle una mano amiga.
Después de tratar su estado de salud, la fundación Roket Dog. Se dispuso a buscar un hogar que pudieran brindarle el cuidado y cariño que se merece todo animalito en este mundo. Y así fue, Solomino encontró un hogar donde vivir.
Sin embargo, no fue nada fácil encontrarlo muchos hogares rechazaron a Solovino. Nada parecía claro y Solovino no encontraba el hogar adecuado. Un día Carol Messina, mediante redes sociales conoció el caso que le conmovió; al ver como Solomino fue rechazado en varios hogares, y, sin duda alguna contactó para darle un hogar, una familia y sobre todo amor.
Eran muchos factores que afectaban a Solovino, ya que era muy desanimado y temeroso. Por lo que dificultaba las cosas, quizás no se le brindo un tratamiento adecuado en un principio para rehabilitarlo después de pasar más de una década en las calles, y lo que conlleva vivir en la intemperie, los peligros que hay y que vivió Solomino.
“Tan pronto como vi su rostro en el sitio, quería amarlo. Sabía que era el destino. Luego, cuando lo conocí y vi lo desanimado que estaba, supe que se quedaría conmigo para siempre, pase lo que pase”.
Señaló Carol en una entrevista con el medio digital The Dodo.
Así fue el amor brindado por Carol, sin siquiera conocer a Solovino; algo que dice mucho de la gran persona que es esta mujer, el sentimiento y las expresiones a los perritos da confianza. Quizás fue algo que nunca tuvo en los demás hogares que le rechazaron.
“Cuando vino a vivir conmigo, mantuvo su cola entre sus patas durante meses. Era poco sociable con los perros, las personas y los gatos, se atemorizaba cada vez que alguien trataba de acariciarlo”
Palabras de Carol
Algo que Carol notó rápidamente, era la deficiencia auditiva que padecía Solovino; algo que le dificultaba para interactuar con las personas de su alrededor. Carol entendió que había que traerle y entenderle de acuerdo a las necesidades de salud que el perro tenía. Ha esto sumarle otro problema de salud en su dentadura que fue atendida, según narra Carol.
“Las personas que viven a nuestro alrededor siempre comentan que ya ni siquiera parece el mismo perro. Ahora sonríe, da vueltas y corre al aire libre una docena de veces al día”.
Carol cuenta a The Dodo
Muchas personas que conocieron a Solovino quedaron admirada. Ante la transformación que vivió Solovino, es algo que no parecía ser posible, pero Carol demostró que, entendiendo a los animales de la forma correcta, no solo brindas un hogar, sino que, convives con ellos y eres para ellos, como ellos son para ti. Una lección de simpatía y atención a los animales, pueden cambiar sus vidas para siempre, olvidando aquellos momentos difíciles que le deparó las calles.