No hay nada mejor que los regalos, en donde un hogar de ancianos decidió regalar un gato a la abuelita en este día tan especial.
La abuelita cumplía 103 años, y fue sorprendida por el hogar de ancianos al saber que le regalaron un gato con el cual disfruta su compañía. Una historia muy emocionante y por la hazaña de la abuelita al superar los 103 años.
Historia
Los detalles son importantes para el hogar de ancianos, donde la prioridad siempre será atender a los abuelitos que llegan ahí, sorprendiéndolos con regalos y el día de su cumpleaños, es así como mantienen un ambiente alegre para los abuelitos, cada detalle cuenta.
Después de haber realizado un tierno gesto con una de las abuelitas que están en ese lugar. Se trata de Lillian Grant, quien ha estado viviendo en el recinto durante unos años. Por lo que ya es muy conocida y querida por todos los miembros de la comunidad. Es por eso que desde el equipo de cuidado del hogar de ancianos decidieron cumplir un sueño que tenía desde hace mucho tiempo. Le regalaron un gatito para su cumpleaños número 103. Lillian siempre fue amante de los animales.
Una historia anterior de amor entre Lillian y un gato Sammy (quién ya falleció); conmovió al equipo del hogar a sorprenderla en ese día tan especial. Así fue como consiguieron un gatito a través de un refugió. La gatita en cuestión, Marley, es una gata de 9 años de edad. Esta fue llevada por su antiguo dueño al hogar refugió de animales donde fue cuidada por el personal hasta que alguien la adoptara y así pasó. Antes de esto Lillian, fue consultada de que quería para su cumpleaños, y ella respondió que un lindo gatito como Summy.
Y así fue, como Lillian vio y abrazo por primera vez a Marley, tan como si se tratare de una gatita y su dueña de años, coincidieron entre si y se formo un lazo entra las dos. Nació una nueva historia de amor. Lillian creyó en un principio que la gatita estaba de pasó y que no se quedaría con ella, y fue todo lo contrario, pues en esta ocasión llegó para quedarse y ser su ángel guardián.
Se emocionó hasta las lágrimas cuando supo que sería de ella para siempre. Ahora Marley le hace compañía a Lillian en el hogar de ancianos. Y desde la administración se comprometieron a cuidar de ella cuando Lillian ya no esté.